La estructura

Desde hace dos meses el Museo del Puerto está en obra. Gracias a un subsidio de la DAAD*, se están reparando varias zonas de este edificio construido originalmente por la empresa Ferrocarril del Sud en 1907: columnas, frentín, cenefas, barandas, pisos de las galerías. Una de las consecuencias de toda esta actividad es la de permitirnos ver, de pronto, la estructura: viejas vigas y tirantes de pinotea quedan al descubierto y nos presentan una faz de la historia que habíamos tenido poco en cuenta. ¿De dónde venían estas maderas? ¿Quiénes las cortaron? ¿Cómo llegaron hasta acá? ¿Cuántos años tenían esos árboles? ¿Cómo se interroga un listón?

*[Con el apoyo del DAAD Artists-in-Berlin Program con fondos del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores en el marco del Fondo Internacional de Ayuda para Organizaciones Culturales y Educativas]

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Obrador en movimiento

Sí, ya se inició la recuperación del edificio del Museo del Puerto gracias al subsidio que obtuvimos en el concurso organizado por el Programa DAAD “Artists-in-Berlin” con fondos del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania. Se trató de un comienzo ligado a la urgencia: necesitábamos reparar cuanto antes un fragmento del techo que venía generando desde hace varios meses una fuerte filtración de agua en la galería de acceso. El trabajo lo llevaron a cabo integrantes de la ONG “Cangrejitos de Barro”, del vecino barrio Boulevard, porque un problema técnico se resuelve con mucho más que con técnica.

¿Cómo empieza una obra? ¡En reunión, conversando!

“También se necesitan chapas, maderas y canaletas para contar la historia de una comunidad”. Sí, ese es el largo nombre del proyecto del Museo del Puerto seleccionado este año por el Programa DAAD “Artists-in-Berlin” junto a otras 11 iniciativas de todo el mundo. Es una gran noticia, porque estos fondos del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania (AA) nos van a permitir reparar aspectos del edificio del museo que en los últimos años adquirieron un carácter de urgencia (maderas de todo el exterior, canaletas del patio interno, filtraciones en la galería de acceso).

Como dicen las vecinas de nuestra Asociación de Amigas: “A grandes problemas, grandes soluciones”.

Esta semana ya tuvimos una reunión con los carpinteros, techistas y zingueros que van a formar parte de las obras. Hablamos mucho, y no sólo de materiales, plazos y elementos de seguridad. Porque todos ellos forman parte de la comunidad de Ingeniero White, y por tanto la reconstrucción del edificio del museo será además una gran oportunidad para que ellos mismos encuentren oportunidades en estos tiempos de crisis.

A partir de hoy, se vendrán muchas noticias de un obrador en movimiento.

Buenas noticias!

Hoy queremos compartirles una lindísima noticia que llega justo en el mes de cumpleaños del museo, así que la contamos como parte del festejo: el programa Berliner Künstlerprogramm des DAAD (“Programa de Artistas-en-Berlín”) de Alemania seleccionó nuestro proyecto “TAMBIÉN SE NECESITAN MADERAS, CHAPAS Y CANALETAS PARA CONTAR LA HISTORIA DE UNA COMUNIDAD” para financiar los trabajos de reparación y cuidado del edificio histórico del Museo del Puerto, que los necesita con urgencia.
Hace unos meses, por iniciativa del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania y el Goethe-Institut, se estableció un fondo de ayuda internacional para brindar apoyo inmediato a las organizaciones culturales y educativas en el extranjero durante la pandemia del coronavirus. El programa DAAD Artists-in-Berlin es parte de esa inicitiva y eligió al proyecto del Museo del Puerto como uno de los 12 premiados entre instituciones de México, Costa Rica, Rusia, Colombia y Malasia.
¡Esto es mucho más que una buena noticia de infraestructura! Se trata nada más y nada menos que de poder reconstruir el espacio donde desarrollamos nuestro proyecto, donde damos la bienvenida cotidiana a las escuelas, donde las vecinas de la Asociación Amigas preparan el chocolate, donde se aloja buena parte del patrimonio tangible e intangible de la comunidad y donde, en definitiva, se cuenta la historia y, a partir de ella, se interviene en el presente para proyectar una y otra vez imaginaciones colectivas del futuro.