Desde hace años en los ciclos realizados en la Cocina del Museo se trata de visibilizar, incluso en retrospectiva, el valor del trabajo de muchas mujeres en la dinámica de un puerto, que histórica y deliberadamente ha sido pasado por alto. Pero no sólo eso. También -con las tensiones y contradicciones que implica- se propone pensar el trabajo en la cocina como una labor creativa, imaginativa; reconocer ahí conocimientos muy específicos, no sólo de física y química en una preparación culinaria, sino también de economía (dónde encontrar los mejores precios, materiales, calcular costos), de adaptación (cómo transmitir y apropiarse de recetas inmigrantes, hoy), de invención y estilo (¿no es todo un arte la terminación de una torta?).
Aun así, la pregunta por el rol de las mujeres en el espacio productivo portuario, en la vida social, cultural y política de la comunidad, aun debe ser profundizada, problematizada, llevada más a fondo. Para empezar, hoy presentamos este nuevo número de Boya 70 con distintas miradas sobre las trabajadoras. Participan Mercedes D´alessandro, María Belén Bertoni y Graciela Hernández, colectivo Latefem, Fernanda Laguna, Archivo de la Memoria Trans.