Falta sólo un día para el bingo de la Asociación Amigas, sus integrantes se preparan, moviendo mesas, comida, premios, concentradas en la organización y los detalles. Sí, año a año, el bingo de las Amigas llena la cocina con más de 100 personas de barrios cercanos y en su mayoría de White. Llegan con ganas de jugar, comer algo rico, encontrarse con otras… en un museo. Así que también para el equipo del Museo del Puerto es un día especial, entre otros preparativos hay que inventar el premio gratis, el bingo Nº8.
¿Qué es? Es el premio que se reparte gratis, sin tener que comprar el cartón, y contiene objetos elegidos en relación a los proyectos que el museo quiere difundir. Por ejemplo, cuando en 2010 el proyecto “La Cocina llena de enchufes” indagaba el uso de electrodomésticos en la historia de las cocinas, el premio fue una cafetera eléctrica; cuando indagamos las canzonettas más cantadas de White, el premio un cd de Roberto Murolo, y así.
Se trata de un premio que justo antes de sortearse se presenta especialmente (y en breves palabras). Se trata de integrar a la actividad de las Amigas un diálogo activo con parte de la comunidad sobre los contenidos del museo, pero ¡atención! sin cortar el cantar de bingos sino alentándolo, ya que hay más de 100 personas atentas a la próxima línea y cartón lleno.
Podemos decir que gracias al bingo 8, que implementamos desde 2008, se han difundido decenas de actividades y realizado convocatorias a la comunidad. Concretamente, hay vecinas que han acercado repasadores junto a sus historias, macetas y gajitos para armar el paseo de los bidones, contado sus recuerdos acerca de la historia de la pesca y las canzonettas, recopilado recetas para el archivo, incentivando la participación en otras actividades del año. ¿Un ejemplo bien material? El enano que todos los días espera en el patio, sosteniendo un canasto con flores pintadas, nació de un bingo. Mañana, entre las mesas, veremos cómo sigue…